Bienvenido a nuestro sitio web dedicado a explorar los muchos versículos y enseñanzas de la Biblia sobre Brújula. Este tema es fundamental en nuestras vidas y queremos ayudarte a comprenderlo mejor.
En este sitio, encontrarás una colección de versículos de la Biblia y escrituras relacionadas que abordan directamente el tema de Brújula, así como numerosos pasajes que profundizan en las complejidades y matices de este tema.
Esperamos que encuentres esta información valiosa e inspiradora mientras te sumerges en el estudio de este importante aspecto de la fe. ¡Acompáñanos en este viaje hacia el conocimiento y la comprensión de la Palabra de Dios!
“Establécete señales, ponte majanos altos, nota atentamente la calzada; vuélvete por el camino por donde fuiste, virgen de Israel, vuelve a estas tus ciudades”
— Jeremías 31:21
“Entonces tus oídos oirán a tus espaldas palabra que diga: Este es el camino, andad por él; no echéis a la mano derecha, ni tampoco torzáis a la mano izquierda”
— Isaías 30:21
“Conozco, oh Jehová, que el hombre no es señor de su camino, ni del hombre que camina es el ordenar sus pasos”
— Jeremías 10:23
“La integridad de los rectos los encaminaráPero destruirá a los pecadores la perversidad de ellos”
— Proverbios 11:3
“El corazón del hombre piensa su caminoMas Jehová endereza sus pasos”
— Proverbios 16:9
“Porque este Dios es Dios nuestro eternamente para siempreÉl nos guiará aun más allá de la muerte”
— Salmos 48:14
“En aquel día vosotros conoceréis que yo estoy en mi Padre, vosotros en mí, yo en vosotros”
— Juan 14:20
“Lavaré en inocencia mis manosY así andaré alrededor de tu altar, oh Jehová”
— Salmos 26:6
“Lámpara es a mis pies tu palabraY lumbrera a mi camino”
— Salmos 119:105
“Te haré entender, te enseñaré el camino en que debes andarSobre ti fijaré mis ojos”
— Salmos 32:8
“Porque él mira hasta los fines de la tierraY ve cuanto hay bajo los cielos”
— Job 28:24
“Todos tuvieron miedo, glorificaban a Dios, diciendo: Un gran profeta se ha levantado entre nosotros; : Dios ha visitado a su pueblo”
— Lucas 7:16
“Jesús mismo al comenzar su ministerio era como de treinta años, hijo, según se creía, de José, hijo de Elí”
— Lucas 3:23
“Jesús se acercó les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo en la tierra”
— Mateo 28:18
“Después del pacto con él, engañará subirá, saldrá vencedor con poca gente”
— Daniel 11:23
“No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí”
— Juan 14:1
“Salí del Padre, he venido al mundo; otra vez dejo el mundo, voy al Padre”
— Juan 16:28
“Mi Padre que me las dio, es mayor que todos, nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre”
— Juan 10:29
“En aquella misma hora Jesús se regocijó en el Espíritu, dijo: Yo te alabo, oh Padre, Señor del cielo de la tierra, porque escondiste estas cosas de los sabios entendidos, las has revelado a los niños. Sí, Padre, porque así te agradó”
— Lucas 10:21
“Jesús entonces, enseñando en el templo, alzó la voz dijo: A mí me conocéis, sabéis de dónde soy; no he venido de mí mismo, pero el que me envió es verdadero, a quien vosotros no conocéis”
— Juan 7:28
“Él se apartó de ellos a distancia como de un tiro de piedra; puesto de rodillas oró”
— Lucas 22:41
“Yendo un poco adelante, se postró sobre su rostro, orando diciendo: Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa; pero no sea como yo quiero, sino como tú”
— Mateo 26:39
“Entonces Jesús, clamando a gran voz, dijo: Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu. habiendo dicho esto, expiró”
— Lucas 23:46
“El Espíritu del Señor está sobre míPor cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobresMe ha enviado a sanar a los quebrantados de corazónA pregonar libertad a los cautivosY vista a los ciegosA poner en libertad a los oprimidos”
— Lucas 4:18
“Irán con lloro, mas con misericordia los haré volver, los haré andar junto a arroyos de aguas, por camino derecho en el cual no tropezarán; porque soy a Israel por padre, Efraín es mi primogénito”
— Jeremías 31:9
“Después de la deportación a Babilonia, Jeconías engendró a Salatiel, Salatiel a Zorobabel”
— Mateo 1:12
“Les dijo: Cualquiera que reciba a este niño en mi nombre, a mí me recibe; cualquiera que me recibe a mí, recibe al que me envió; porque el que es más pequeño entre todos vosotros, ese es el más grande”
— Lucas 9:48
“Tomó Jesús aquellos panes, habiendo dado gracias, los repartió entre los discípulos, los discípulos entre los que estaban recostados; asimismo de los peces, cuanto querían”
— Juan 6:11
“Yo les he dado tu palabra; el mundo los aborreció, porque no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo”
— Juan 17:14
“Mientras él les decía estas cosas, vino un hombre principal se postró ante él, diciendo: Mi hija acaba de morir; mas ven pon tu mano sobre ella, vivirá”
— Mateo 9:18
“Entonces le fueron presentados unos niños, para que pusiese las manos sobre ellos, orase; los discípulos les reprendieron”
— Mateo 19:13
“Cerca de la hora novena, Jesús clamó a gran voz, diciendo: Elí, Elí, ¿lama sabactani? Esto es: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?”
— Mateo 27:46
“Yo ruego por ellos; no ruego por el mundo, sino por los que me diste; porque tuyos son”
— Juan 17:9
“Respondió entonces Jesús, les dijo: De cierto, de cierto os digo: No puede el Hijo hacer nada por sí mismo, sino lo que ve hacer al Padre; porque todo lo que el Padre hace, también lo hace el Hijo igualmente”
— Juan 5:19
“Pero yo le conozco, porque de él procedo, él me envió”
— Juan 7:29
“Jesús entonces les dijo: Si vuestro padre fuese Dios, ciertamente me amaríais; porque yo de Dios he salido, he venido; pues no he venido de mí mismo, sino que él me envió”
— Juan 8:42
“El que no me ama, no guarda mis palabras; la palabra que habéis oído no es mía, sino del Padre que me envió”
— Juan 14:24
“Jesús les respondió dijo: Mi doctrina no es mía, sino de aquel que me envió”
— Juan 7:16
“Jacob engendró a José, marido de María, de la cual nació Jesús, llamado el Cristo”
— Mateo 1:16
“Porque yo no he hablado por mi propia cuenta; el Padre que me envió, él me dio mandamiento de lo que he de decir, de lo que he de hablar”
— Juan 12:49
“Pero de aquel día de la hora nadie sabe, ni aun los ángeles que están en el cielo, ni el Hijo, sino el Padre”
— Marcos 13:32
“Arrojando las piezas de plata en el templo, salió, fue se ahorcó”
— Mateo 27:5
“Les dijo, pues, Jesús: Cuando hayáis levantado al Hijo del Hombre, entonces conoceréis que yo soy, que nada hago por mí mismo, sino que según me enseñó el Padre, así hablo”
— Juan 8:28
“El Señor, después que les habló, fue recibido arriba en el cielo, se sentó a la diestra de Dios”
— Marcos 16:19
“Yo rogaré al Padre, os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre”
— Juan 14:16
“Después que los hubo despedido, se fue al monte a orar”
— Marcos 6:46
“Pero del día la hora nadie sabe, ni aun los ángeles de los cielos, sino solo mi Padre”
— Mateo 24:36
“Despedida la multitud, subió al monte a orar aparte; cuando llegó la noche, estaba allí solo”
— Mateo 14:23
“Aconteció que cuando todo el pueblo se bautizaba, también Jesús fue bautizado; orando, el cielo se abrió”
— Lucas 3:21
“Así, no es la voluntad de vuestro Padre que está en los cielos, que se pierda uno de estos pequeños”
— Mateo 18:14
“Me buscaréis me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón”
— Jeremías 29:13
“En aquellos días él fue al monte a orar, pasó la noche orando a Dios”
— Lucas 6:12
“Aconteció como ocho días después de estas palabras, que tomó a Pedro, a Juan a Jacobo, subió al monte a orar”
— Lucas 9:28
“Mas yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio”
— Mateo 12:36
“Pero desde ahora el Hijo del Hombre se sentará a la diestra del poder de Dios”
— Lucas 22:69
“Habéis oído que yo os he dicho: Voy, vengo a vosotros. Si me amarais, os habríais regocijado, porque he dicho que voy al Padre; porque el Padre mayor es que yo”
— Juan 14:28
“Ya no estoy en el mundo; mas estos están en el mundo, yo voy a ti. Padre santo, a los que me has dado, guárdalos en tu nombre, para que sean uno, así como nosotros”
— Juan 17:11
“Porque el Padre ama al Hijo, le muestra todas las cosas que él hace; mayores obras que estas le mostrará, de modo que vosotros os maravilléis”
— Juan 5:20
“A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer”
— Juan 1:18
“Mas él se apartaba a lugares desiertos, oraba”
— Lucas 5:16
“El que a vosotros oye, a mí me oye; el que a vosotros desecha, a mí me desecha; el que me desecha a mí, desecha al que me envió”
— Lucas 10:16
“Les he dado a conocer tu nombre, lo daré a conocer aún, para que el amor con que me has amado, esté en ellos, yo en ellos”
— Juan 17:26
“Hijo de Joana, hijo de Resa, hijo de Zorobabel, hijo de Salatiel, hijo de Neri”
— Lucas 3:27
“Sin embargo, es necesario que hoy mañana pasado mañana siga mi camino; porque no es posible que un profeta muera fuera de Jerusalén”
— Lucas 13:33
“Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios”
— Juan 1:12
“El gallo cantó la segunda vez. Entonces Pedro se acordó de las palabras que Jesús le había dicho: Antes que el gallo cante dos veces, me negarás tres veces. pensando en esto, lloraba”
— Marcos 14:72
“Porque yo Jehová no cambio; por esto, hijos de Jacob, no habéis sido consumidos”
— Malaquías 3:6
“Si yo doy testimonio acerca de mí mismo, mi testimonio no es verdadero”
— Juan 5:31
“No puedo yo hacer nada por mí mismo; según oigo, así juzgo; mi juicio es justo, porque no busco mi voluntad, sino la voluntad del que me envió, la del Padre”
— Juan 5:30
“Mas para que el mundo conozca que amo al Padre, como el Padre me mandó, así hago. Levantaos, vamos de aquí”
— Juan 14:31
“Estas cosas habló Jesús, levantando los ojos al cielo, dijo: Padre, la hora ha llegado; glorifica a tu Hijo, para que también tu Hijo te glorifique a ti”
— Juan 17:1
“Levantándose muy de mañana, siendo aún muy oscuro, salió se fue a un lugar desierto, allí oraba”
— Marcos 1:35
“Este, pues, con el salario de su iniquidad adquirió un campo, cayendo de cabeza, se reventó por la mitad, todas sus entrañas se derramaron”
— Hechos 1:18
“Respondió Jesús les dijo: Aunque yo doy testimonio acerca de mí mismo, mi testimonio es verdadero, porque sé de dónde he venido a dónde voy; pero vosotros no sabéis de dónde vengo, ni a dónde voy”
— Juan 8:14
“Porque no hay acepción de personas para con Dios”
— Romanos 2:11
“Pero ahora voy al que me envió; ninguno de vosotros me pregunta: ¿A dónde vas?”
— Juan 16:5
“Le dijo la mujer: Señor, me parece que tú eres profeta”
— Juan 4:19
“Varones israelitas, oíd estas palabras: Jesús nazareno, varón aprobado por Dios entre vosotros con las maravillas, prodigios señales que Dios hizo entre vosotros por medio de él, como vosotros mismos sabéis”
— Hechos 2:22
“Él es la propiciación por nuestros pecados; no solamente por los nuestros, sino también por los de todo el mundo”
— 1 Juan 2:2
“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”
— Juan 3:16
“Jesús le dijo: No me toques, porque aún no he subido a mi Padre; mas ve a mis hermanos, diles: Subo a mi Padre a vuestro Padre, a mi Dios a vuestro Dios”
— Juan 20:17
“Aconteció que mientras Jesús oraba aparte, estaban con él los discípulos; les preguntó, diciendo: ¿Quién dice la gente que soy yo?”
— Lucas 9:18